Ser vegetariano en Filipinas es complicado, no os voy a mentir. Casi todos los platos típicos del país incluyen carne, siendo el cerdo el ingrediente principal en muchos de ellos, y como en España, aquí también hay gente que considera el pollo un… ¿vegetal? Así que encontrar un plato bueno solamente de verduras en casi una misión imposible. Sin embargo, vivir en Manila unos meses nos ha dado la oportunidad de conocer algún que otro restaurante vegetariano que nos ha dejado con muy buen sabor de boca. Evidentemente son restaurantes con comida elaborada en los que los precios son algo más caros que en cualquier local, pero la calidad de la comida hizo que no nos importara pagar por ello.
El restaurante del que os queremos hablar hoy se llama Agico Vegetarian Cafe y se encuentra en el barrio de San Juan, muy cerca de Mandaluyong, donde nos alojábamos nosotros. La lástima fue descubrirlo tan tarde porque… ¡qué comida!
Las paredes del local dejan patente a través de pinturas y carteles que se trata de un restaurante vegetariano que además de preocuparse por el bienestar animal lo hace por la comida sana. Y tras probar algunos de sus platos confirmamos que también ponen énfasis en que éstos sean ricos y apetecibles.
La carta empieza con una serie de elaborados entrantes que nos costó elegir, pero por suerte hay un par de combos que te permiten probar más de uno. Os recomendamos pedir uno.
Los platos principales son muy variados: curri, ramen, arroces, pasta, ensaladas, sushi… en algunos de ellos usando “sucedáneos” que sustituyen a la carne y el pescado y haciendo especial hincapié en la comida japonesa. Además se puede acompañar de una serie de zumos que ofrece la carta. Por rara que parezca la combinación: el de pepino y manzana está riquísimo.
Si embargo la detallada descripción de lo que contenían las hamburguesas vegetarianas nos convenció y probamos un par de éstas, que además de saciar nuestro hambre superaron con creces nuestras expectativas. No digáis que viendo las fotos no os apetece darles un bocado.
Además de esta primera visita, tuve la suerte de poder probar más platos de este restaurante en una comida de despedida que hicimos en la clínica de Manila, pues se pueden pedir para llevar. Así que después de estas dos veces y habiéndome quedado con ganas de ir más, puedo decir que recomiendo encarecidamente la visita a Agico Vegetarian Cafe. ¡Que aproveche!
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