Reseña del itinerario
Diez días, cinco países y siete trenes. Este es el resumen del viaje en Interrail por Europa Oriental que recorrimos juntas en 2015.
El Interrail no es sólo una experiencia para menores de 26 años (también hay descuentos para familias y jubilados): supone una buena oportunidad para viajar cómodamente por pequeñas ciudades de Europa.
Lo ideal es hacer trayectos cortos y dormir en trenes nocturnos para tener el tiempo suficiente de visitar los destinos elegidos.
En este viaje recorremos buena parte de Europa Oriental: pasamos de pasear entre los bellos palacios de Viena, a disfrutar de la naturaleza de Eslovenia y vemos cómo Bratislava sigue teniendo ese aire post-soviético que hace que también este sea un viaje cultural e histórico por la otra Europa.
Si estáis pensando hacer un Interrail no lo dudéis: ¡Nunca es tarde!
Datos del viaje
- Viajeros: Anna y Elena
- Web: https://mochilerosdeviaje.com/ruta-interrail-10-dias-croacia-eslovenia-austria-republica-checa-eslovaquia/
- Fecha de salida: 01/03/2016 – Fechas de regreso: 31/03/2016
Ruta realizada
| Día 1 | Barcelona – Dubrovnik. Este es un viaje en tren que empieza en avión. Volamos rumbo a Dubrovnik para conocer una de las ciudadelas medievales mejor conservadas de Europa. Recorremos las calles empedradas del casco antiguo y vemos el singular perfil de la ciudad desde lo alto de los muros. Por la tarde, cogemos un autobús que recorre en 4h la distancia hasta Split (en Dubrovnik no hay estación de tren). |
| Día 2 | Split. El casco antiguo de la ciudad forma parte del complejo del Palacio de Diocleciano, un gran recinto de planta cuadrada que albergaba altares romanos, plazas, vías empedradas y numerosas estancias de palacio. Split es una ciudad muy animada y la plaza del Persitilio es el centro de la diversión. |
| Día 3 | Isla de Brač / Tren nocturno a Zagreb. Tomamos un barco en la terminal de ferrys hasta la Isla de Brač. En 1 hora llegamos a Supetar, la capital de la isla. Nos quedamos un rato bajo el sol del Mediterráneo en las playas de los alrededores. Volvemos a Split para subir en el primer tren de este viaje en Interrail que nos llevará hasta Zagreb. |
| Día 4 | Zagreb. Tras 8 horas de viaje nocturno en tren litera (hay que pagar un suplemento de 10€ aparte del pase), llegamos a la capital de Croacia. La ciudad se recorre fácilmente a pie. Visitamos la parte alta y la parte baja y la Iglesia de San Marcos, un singular edificio reconocible por las vidrieras de colores que conforman el escudo del país sobre el tejado. |
| Día 5 | Ljubljana / Bled: Madrugamos para salir en el primer tren rumbo a la capital de Eslovenia. Una vez llegamos a Ljubljana, tomamos otro tren en dirección a Bled. Allí paseamos alrededor del lago de Bled, el lugar más icónico del país. Por la tarde, regresamos a Ljubljana y visitamos el castillo de la ciudad. |
| Día 6 | Salzburgo. Este nuevo recorrido en tren cruza los Alpes para llegar hasta Sazlburgo, la ciudad natal de Mozart. Subimos hasta la impresionante fortaleza de Hohensalburg, sede del Arzobispado de Salzburgo. Esta es una de las visitas más bonitas del viaje. |
| Día 7 | Brno. Tomamos un tren rumbo a Viena y hacemos transbordo para llegar a Brno, la segunda ciudad más importante de la República Checa. Aquí apenas hay turistas y poca gente habla inglés. La caminata hasta el castillo de Spielberk es recomendable. |
| Día 8 | Bratislava. Llegamos hasta Eslovaquia, un país de clara herencia soviética. Encontramos edificios grises de estilo comunista pero también un casco antiguo muy agradable y bonito por donde pasear. La Iglesia azul y el Castillo de Bratislava son dos visitas que no te puedes perder. Visitar Bratislava es como volver a los años 80 de un país soviético. Por la tarde, cogemos un tren que nos dejará en Viena. |
| Día 9 | Viena. La ciudad de la música y de los palacios . Visitamos el palacio de Hofburg donde hay una exposición permanente que recorre la vida de Sissí la Emperatriz a través de varias estancias del palacio. Sissí fue una mujer atormentada que dejó huella por sus excentricidades. Todo un símbolo del Imperio Austro-húngaro. |
| Día 10 | Viena – Barcelona. Recorremos el centro de la ciudad y vemos una ópera en directo junto con un gran número de personas que cada tarde se acerca hasta la Ópera de Viena para escuchar buena música clásica en la pantalla de la fachada exterior (se retransmite en directo el concierto del interior). Regresamos a Barcelona tras un intenso viaje en Interrail que nos ha permitido conocer buena parte de Europa Oriental. |
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Mapa de ruta
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