En dirección a Kep y a 8 Km de Kampot llegaremos a Phnom Chhnork, un lugar donde encontrar bonitas cuevas que se forman en las laderas calizas de la zona.
Para llegar a las cuevas de Phnom Chhnork deberemos recorrer a pie un pequeño sendero rodeado de campos de arroz partiendo desde Wat Ang Sdok. Una vez subidos los 203 escalones hasta la parte alta descubriremos un paisaje impresionante por el que ya habrá valido la pena el esfuerzo.
Todo este recorrido lo haremos con la ayuda de los pequeños guías que te acompañarán durante la visita: los niños. Siempre a la caza del turista para poder obtener uno pocos dólares su compañía es de lo más agradable.
Una vez arriba llegamos a la entrada a la cueva, una pequeña escalera que nos adentra hacia dentro de la misma, donde ya se vislumbra la poca luz que nos encontraremos más adelante.
Allí dentro, lo primero que notas es el cambio de temperatura con el exterior, dejando a un lado al menos un poco el bochornocho calor. En el interior hay un templo de ladrillo del s.VII dedicado a Siva que, a resguardo en la cueva, ha permanecido en bastante buen estado.
También hay colgadas algunas banderitas decoran el recinto y le dan un poco de color a la escena.
Para realizar el recorrido total se debe pasar por unos pasadizos un poco angostos donde la escasa luz y los murciélagos le dan un pequeño toque de emoción a la visita. No es más que un pequeño tramo, puesto que en breve encuentras la luz del sol que te indica que hay una salida. La luz de la linterna es imprescindible para poder hacer el camino con mayor seguridad.
Una vez fuera vuelves a encontrarte con los magníficos campos de arroz y con el calor de Camboya.
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