Cap. 08 – Tremendo paisaje de camino a Nuwara Eliya

El día que dejamos Dambulla y marchamos en dirección a las tierras altas de Sri Lanka dimos por finalizada la primera parte del viaje, la más cultural, al mismo tiempo que inauguramos la segunda y la que más me gustó, el encuentro con la flora y la fauna de la isla. Atrás quedaban templos, ruinas y visitas eternas; Motoret nos llevaba al corazón de la antigua Ceilán

Grabando los últimos vídeos de las ruinas

El trayecto hasta Kandy transcurrió sin pena ni gloria, pues a parte de un templo hindú que vimos en Matale, el paisaje no era especialmente bonito todavía y había mucho tráfico aquella mañana. Además cuando llegamos a la ciudad no nos llamó nada la atención. Cenamos en el restaurante de un hotel cercano y por la tarde hicimos poco más que sentarnos en la terraza del hostal a mirar las travesuras de los macacos que andaban robando comida por las azoteas de los edificios. En realidad estábamos deseando partir ya hacia Nuwara Eliya, pero debíamos esperar hasta la mañana siguiente pues había un buen tramo hasta llegar allí. No fuimos a ver el diente de buda porque no queríamos ni oír hablar de templos y el lago lo vimos desde el tuk tuk cuando, por la noche, fuimos a buscar a Diana y Fede para salir a cenar con ellos.

El templo hindú de Mantale
Vistas de Kandy
El balcón de nuestro hotel (y los monos, Toni y…)

El día siguiente partimos muy temprano pues no teníamos muy claro cuánto íbamos a tardar en llegar a Nuwara Eliya. Además no queríamos ir con prisas, pues este es uno de los trayectos más bonitos de la isla y queríamos disfrutarlo sin tener que correr. Es muy común entre los viajeros recorrer la distancia entre Kandy y Ella en tren pues el paisaje es una de las cosas más impresionantes y bonitas de Sri Lanka. Como nosotros teníamos nuestro propio tuk tuk lo hicimos por nuestra cuenta e hicimos una parada en medio en Nuwara Eliya.

Desayunando antes de partir
Un momento cualquiera en el tuk tuk

Aquel viaje nada tuvo que ver con el del dia anterior, pues además de sufrir mucho menos el tráfico (el único tramo ajetreado fue el que separa Kandy de Peradeniya), el verde empezó a ser el protagonista muy pronto ganando cada vez más y más territorio a aquel espectacular paisaje.

Al ritmo que íbamos ascendiendo el verde claro inicial fue dando paso a toda una paleta de distintas tonalidades y las escasas palmeras que vimos al principio quedaron escondidas entre la variada flora de la zona. Al cambio de paisaje se le sumó el de temperatura, y si al principio me pude conformar con un pañuelo al cuello, pronto necesité ponerme la sudadera para hacer frente al fresco que hacía a aquellas alturas.

Cascadas camino de Nuwara Eliya

A pesar de nuestras dudas iniciales, el viaje en tuk tuk fue maravilloso, y aunque nos quedó la espinita de no haber subido al tren, Motoret lo compensó con creces. Disfrutamos como niños con las cámaras, parando cada dos por tres a hacer fotos y vídeos sin dejar de admirar aquel maravilloso espectáculo.

En el tramo final, el paisaje volvió a cambiar drásticamente pues, toda esa variedad de tonos se volvió a difuminar en uno solo, el de las protagonistas plantaciones de té. Además el sol ahora solo brillaba por su ausencia y unos enormes y negros nubarrones cubrían el cielo. Un viento frío, casi hivernal, nos daba la bienvenida a Nuwara Eliya.

Los campos de té haciendo acto de presencia
Foto sacada de nuestra cuenta de www.instagram.com/conmochilagram

La guesthouse a la que nos dirigimos en primer lugar estaba al completo pero sus propietarios, muy amablemente nos facilitaron la dirección de Chez Allen, una homestay regentada por un matrimonio muy agradable situada en la parte alta del pueblo. Su gran sala de estar y su sofá nos atraparon de tal manera que se nos hizo de noche. Nos dimos cuenta cuando la propietaria empezó a sacar los platos de la cena, un sabrosísimo curri de varios platos que hizo que nos chupáramos los dedos. Aquella família hacía que nos sintiésemos muy agusto en su casa, el día siguiente tendríamos todo el tiempo del mundo para visitar la ciudad, esa noche el sofà nos llamaba  a gritos…

En nuestra cálida guesthouse

Ver comentarios

  • Hola!! Nos vamos dos semanas en nov-Dic a Sri Lanka y necesito seguir leyendo de vuestras aventuras con Motoret por este maravilloso país. ¿qué ruta nos recomendais para 15 días?

    Muchas gracias!!

    Irache