Si hay un templo de Ayutthaya que aparece en todas las postales, ese es el Wat Mahathat. La icónica cabeza de Buda atrapada entre las raíces de un árbol se ha convertido en símbolo no solo del templo, sino de toda la antigua capital tailandesa. Y no es para menos: millones de viajeros se detienen frente a ella cámara en mano, cautivados por su aura misteriosa y casi mágica.
Ahora bien, si dejamos las fotos de lado y nos centramos en el conjunto del recinto, hay que decir que, aunque tiene rincones interesantes, no es el templo más bonito de Ayutthaya. Su fama le viene más por lo fotogénico que por lo imponente. Aun así, sigue siendo una visita imprescindible.
Si estás en Ayutthaya puedes ir a visitar éste y muchos otros templos en bici por tu cuenta, pero si estás en Bangkok lo puedes hacer en un par de excursiones desde la capital, que te llevarán todo el día, ambas con guía en español:
El Wat Mahathat, cuyo nombre significa monasterio de la gran reliquia, fue construido hacia 1374, durante el reinado de Borommaracha I, apenas unas décadas después de que se fundara Ayutthaya.
En su momento fue uno de los templos más importantes del reino, tanto por su función religiosa (albergaba reliquias sagradas de Buda) como por su localización: estaba justo al lado del Gran Palacio Real.
Este rincón es, sin duda, el gran protagonista de Wat Mahathat. Una cabeza de Buda de piedra asoma entre las raíces retorcidas de un árbol, como si la naturaleza la hubiese envuelto y protegido durante siglos.
No se sabe con certeza cómo llegó hasta ahí, pero se cree que fue decapitada durante el saqueo birmano de 1767 y que, con el paso del tiempo, las raíces del árbol la fueron abrazando hasta dejarla como la vemos hoy.
El resultado es hipnótico. Hay algo en esa imagen que transmite calma, respeto… y mucha curiosidad. Eso sí, por respeto, no está permitido hacerse fotos con la cabeza por encima de ella: hay que agacharse, ya que en Tailandia es una falta de respeto tener la cabeza más alta que una imagen de Buda.
El diseño original del templo sigue el estilo jemer, claramente influenciado por construcciones como las de Angkor. Destacaba una torre central o prang, que en su día alcanzó los 40 metros de altura, rodeada por otras cuatro torres menores en forma de cruz.
Esta estructura solía estar rodeada por un patio y una galería en la que había filas de imágenes de Buda, muchas de ellas decapitadas tras los saqueos birmanos de 1767.
Hoy solo quedan ruinas, pero se puede imaginar la majestuosidad que tuvo en su época.