Wat Ban Tham es una pagoda cercana a Kanchanaburi, a escasos 11 km si salimos desde el centro (si el cuentakilómetros de la moto que alquilamos no falla), donde hacer una visita y de paso quemar unas pocas calorías. Y decimos esto último porque la cueva donde se aloja la figura de Buda está en lo alto de la montaña, y se accede a ella mediante una larga y empinada escalera en forma de dragón, de ahí el nombre.
A continuación os mostramos un vídeo de la subida, en pleno mediodía, que junto con el calor y la humedad hicieron que terminásemos con las piernas temblando del esfuerzo. Aunque merece la pena el esfuerzo por las vistas que se tienen del río Kwai y de toda la zona de los alrededores.
Para llegar hasta el templo de la boca del dragón debemos salir hacia el sur en dirección Bangkok, pasando por delante de la estación de autobuses, hasta llegar a la altura del hospital de Kanchanaburi. Una vez pasado el hospital, a escasos 100 metros, hay una carretera a mano derecha que será la que cogeremos durante un par de kilómetros. Llegaremos a un puente que cruza el río Kwai e inmediatamente después giramos a la izquierda. Hay una señal que lo indica claramente. Hasta este punto habremos recorrido unos 5 kms desde el centro de Kanchanaburi.
A lo largo de estos 6 km iremos todo el rato bordeando el río, que nos quedará a mano izquierda, hasta que veremos, a nuestra derecha, el Wat Ban Tham. Hay una zona con puestos de comida y bebida por si queréis tomar un tentempié.
La subida por las escaleras, teniendo en cuenta el calor que hace en Kanchanaburi, no será del todo agradable, pero merece la pena subir hasta arriba del todo para disfrutar de las vistas. En el interior del dragón hay pinturas a ambos lados de la escalera, y si bien es cierto que son dignos de contemplar nos jugamos lo que queráis a que no os fijáis en la subida, sino en la bajada. Al subir solo estás pendiente de llegar arriba del todo y descansar, os lo aseguro, y ni te das cuenta de los bonitos colores de estas pinturas.
Una vez llegado «al culo» del dragón saldremos a una zona que lleva a unas estancias de los monjes. Es un buen momento para descansar, coger aire y disfrutar de las vistas. Será el momento pues de descalzarse y subir hasta la cueva.
Ya en el interior de Wat Ban Tham vais a tener la recompensa de una bajada de temperatura considerable, como si hubiesen puesto el aire acondicionado. Es un regalo que la naturaleza nos ofrece por haber llegado hasta allí. En la cueva hay varias figuras de Buda y se escucha un agradable silencio solo roto por el aleteo de alguna paloma.
Cuando hayamos visto la cueva saldremos otra vez fuera porque en la misma entrada hay unas escaleras metálicas que nos permiten subir más hacia arriba por el interior de otra cueva. En breve saldremos al exterior, bofetada de calor típica de Tailandia y a subir más arriba por unos escalones de hormigón y piedra habilitados para no ir entre los arbustos. Casi en la cima hay un mirador con unas figuras de Buda desde donde poder divisar el paso del río Khwae, los campos de arroz y las montañas. Siempre que hemos estado ha habido viento que te refresca, por lo que merece la pena subir hasta allí, descansar, relajarse y hacer unas fotos.
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Que pinturas más bonitas y sobre todo la del "culo" . ¿sabemos el número de escalera? Más o menos eh...
jajajajaja. Como lo lea mi madre me dice de limpiarme la lengua con un estropajo...
HUMMMMMMMMMMMM que bonico