El final de nuestra ruta en moto por Vietnam empezaba a tocar su fin y ahora que Ho Chi Minh aparecía en la pantalla de nuestro navegador la idea se hacía más palpable. Todavía quedaba la excursión por el Delta de Mekong, algo que nos hacía especial ilusión, pero el hecho de llegar a esta gran ciudad lo percibíamos como si hubiésemos alcanzado una meta después de casi dos meses de ruta por Vietnam.
Para variar un poco esa mañana decidimos ser puntuales y salir temprano, y eso que el propietario de la guesthouse nos entretuvo un rato con fotos para el recuerdo y la despedida. Éramos conscientes de que en las afueras de la antigua Saigón el tráfico podía ser insoportable, el recuerdo de la salida y las manadas de motocicletas y camiones de Hanoi todavía estaba presente en nuestra memoria y sabíamos que teníamos que ser precavidos.
Pese a eso, el primer tramo del recorrido fue muy tranquilo, tanto que antes de llegar a la carretera nos perdimos y nos costó encontrar a gente para que nos indicara el camino. Como tantas otras veces, lo que nos mostraba el google maps y la realidad no coincidían, y la poca gente mayor que se cruzaba en nuestro camino solo hacía que reírse cuando les preguntábamos algo, cosa que nos hizo pensar que su inglés debía de ser más bien nulo.
Cuando finalmente alcanzamos la carretera empezó la acción. Enseguida hicieron acto de presencia decenas de vehículos que se fueron multiplicando a medida que nos acercábamos a la ciudad y a la red de laberínticas carreteras de sus afueras. Tras un par de paradas para recargar las pilas con sabroso cà phê en unos puestos llenos de hamacas que desde hacía unos cuantos días andábamos viendo, nos armamos de paciencia e hicimos el último recorrido, no sin antes descubrir un pequeño pueblo donde unas enormes rocas emergían de entre las casas.
El trayecto que siguió a continuación fueron caminos que se bifurcaban con más frecuencia de la que hubiésemos deseado, curvas cerradísimas, varios carriles, camioneros kamikazes, motoristas irresponsables y otros cargados de forma imposible con cualquier mercancía… Un montón de ingredientes que hicieron que andásemos con todos los sentidos puestos hasta que nos metimos por fin en la urbe, pues pese a la emoción del viaje había que reconocer que aquello resultaba peligroso.
Nuestros castigados culos pedían llegar ya al alojamiento, pero aún tardamos un rato en encontrarlo pues habíamos ido a parar a uno que se llamaba de forma parecida pero bastante lejos del nuestro. New Sunny Saigon era un hotelito de habitaciones pequeñas pero muy limpias encajado en una de las calles con más movimiento y lleno de sitios para comer y beber, De Tham street. Desde allí podríamos alternar visitas por la ciudad con la preparación de la excursión al Delta del Mekong, la venta de la moto y todavía tendríamos tiempo para pensar en nuestros futuro viaje. Filipinas y Ko Lanta sonaban con fuerza y se debatían en mi interior. Llegaban días de cambios…
También puedes consultar los que a nosotros nos parecen los mejores alojamientos de Ho Chi Minh. En este listado que te los mostramos de más baratos a más caros.
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Hola chicos tengo pensado hacer una ruta desde hanoi hasta saigon,lo que no se es ni por donde empezar.
En itinerarios de viaje a Vietnam dispones de unos cuantos, por si te sirven de ejemplo.