El mito del reciclaje se esconde en Asia: el caso de Malasia

Creo que somos muchos los concienciados que nos hemos preguntado alguna vez: ¿a dónde van esos plásticos que tiramos en el contenedor amarillo? Aunque no tienes muy claro qué pasa con ellos -como concienciado que eres- sigues usándolos porque crees que tu país dispone de la capacidad y tecnología de reciclarlo.

Pero en España el contenedor amarillo lleva 20 años funcionando y a día de hoy gran parte de la población sigue sin saber con exactitud dónde va cada tipo de residuo. Muchos usan la frase de «si al final lo juntan todo» para excusarse, pero en verdad, si hacemos un buen uso de estos contenedores, presionaremos para que la clasificación sea más fácil y rentable.

Al no ser así, la inmensa mayoría de desechos plásticos acaba incinerado sin ninguna misión o aprovechamiento final. En nuestro país o en otros. Así que aquí comienza la historia del mito del reciclaje…

¿Qué esconde Asia?

En Asia encontramos países que han crecido de una forma repentina y, en cierto modo, imitando la forma de vida occidental. Por eso se han convertido en los mayores productores de plásticos del mundo y no lo hacen sólo para satisfacer sus necesidades plásticas; resulta que a parte de exportar productos a los países occidentales, también están recibiendo lo que estos países no quieren: la llamada chatarra plástica.

Detrás de los países Asiáticos, se esconde el mito del reciclaje.
Detrás de los países Asiáticos, se esconde el mito del reciclaje.

Así que si en España la educación ambiental y la gestión de residuos aún es algo limitada, en los países asiáticos básicamente es inexistente. Y es que hay que entender que sus recursos y medios para gestionar sus propios residuos, así como su regulación ambiental, escasean y son insuficientes.

Lo que no nos contaron sobre el reciclaje de los plásticos

No todo el plástico es reciclable. Seguramente sabrás que no todos los plásticos son iguales, se diferencian por la temperatura a la que se ha calentado el material dividiéndolos según el tipo de plástico que va del 1 al 7 (fijo que has visto las flechas que rodean al número en la base de muchos envases) Por ejemplo # 1 (PET): botellas de agua, tienen el valor de reciclaje más alto. Se puede decir que el resto, son bastante complicados y mucho más cuando se mezclan o se les añaden aditivos.

La mayoría de los plásticos contienen polímeros que se entrecruzan para formar un enlace químico irreversible y por lo tanto son infundibles y no reciclables.
La mayoría de los plásticos contienen polímeros que se entrecruzan para formar un enlace químico irreversible y por lo tanto son infundibles y no reciclables.

Lo siguiente que nunca nos han contado es que no se puede reciclar el plástico sucio. Si alguna vez has tirado algún plástico con residuos alimenticios probablemente se haya estropeado todo el lote, ya que cuesta más limpiarlo que desecharlo.

¿Y esto por qué es?

Bueno, los materiales reciclados deben competir con los materiales vírgenes en el mercado, por eso la calidad sí importa.

Así que los artículos más fáciles de reciclar son los productos fabricados con un solo material. Por ello debemos insistir en que los fabricantes reconsidere la composición química de los productos para que la clasificación no sea tan compleja.

La cantidad de aditivos que hacen que tenga un determinado color, una determinada consistencia, transparencia o durabilidad, esos aditivos son los que están complicando todo. Además los científicos llevan alertado mucho tiempo sobre las preocupaciones para la salud de estos aditivos ya que se incorporan en nuestro cuerpo y hay muchos conocidos cancerígenos.

Tu basura también viaja

Por inverosímil que parezca, existe una red comercial que atraviesa los océanos para globalizar hasta nuestros propios residuos. Se ha creado un negocio internacional del reciclaje en donde se gana dinero debido a la ausencia de regulaciones globales, así que algunas empresas se han aprovechado de un mundo sin reglas.

“Entre 1992 y 2018, China importó un 45% acumulativo de los residuos plásticos del mundo.”
“Entre 1992 y 2018, China importó un 45% acumulativo de los residuos plásticos del mundo.”

Realmente China lleva desde la época de los 80 recibiendo basura de occidente. Así que no es que China produzca los plásticos que consumimos sino que a la vez se estaba haciendo cargo de los residuos plásticos del mundo. Y detrás de esto hay un motivo: El negocio internacional del reciclaje.

Las compañías navieras que transportan productos manufacturados de China a los países occidentales terminaban con miles de contenedores de envío vacíos, así que se les ocurrió la brillante idea de llenarlos con plástico para “reciclaje” a tasas bajísimas.

Cruzando el mundo

Llega un punto en el que China se ve tan desbordada de “chatarra plástica” (así es como la llaman ellos) que a principios del 2018 prohíbe la importación de desechos plásticos. Lo que hizo que el mercado se redirigiera hacia los países circundantes.

Y es que si se suponía que los países desarrollados destacan por la buena segregación de residuos, resultó no estar siendo así y los chinos estaban recibiendo containers de residuos sin clasificar e inservibles, por lo que su único destino era la acumulación en vertederos o entornos naturales porque nada se puede hacer con ellos.

Enviar contenedores desde Europa a Asia resulta más económico que pagar los costes de reciclaje en los países Europeos. Así que los puertos asiáticos se han llenado de containers llenos de desechos plásticos.

En muchas ocasiones se encuentran que intencionadamente se mezcla el frente de los contenedores con material bien clasificado y en la parte posterior los desechos ilegales, con la finalidad de escapar del escrutinio para que parezca que están enviando plástico limpio.

Países importadores y exportadores de residuos

Básicamente nos dedicamos a mandar nuestros desechos plásticos al extranjero, a países que ya se están ahogando en plásticos.

La política de China que restringe las importaciones de 24 tipos de desechos sólidos, incluidos los desechos plásticos, entra en vigor en enero 2018.
La política de China que restringe las importaciones de 24 tipos de desechos sólidos, incluidos los desechos plásticos, entró en vigor en enero de 2018.

Para estos países supone un impacto a la seguridad ambiental y la salud pública de sus habitantes. Y lo peor es que se ha llevado a cabo intencionadamente, debido a que se aprovechan de que estos países ofrecen mano de obra barata y una regulación ambiental bastante limitada.

Así que da pie a prácticas ilegales de almacenamiento de desechos en vertederos no autorizados con la posterior incineración de desechos sin ningún control de las emisiones tóxicas tanto al aire como al agua.

En este asunto están implicados varios sectores más o menos organizados con la finalidad de obtener beneficios evitando los costes del tratamiento adecuado de residuos. A parte de esto están los cómplices, aquellos que lo permiten a sabiendas que incluso puede perjudican a su propio entorno. Porque en todo esto hay permisividad de los que deberían estar para regular y es porque existen distintas oportunidades de negocio para todos los implicados.

Hasta la INTERPOL se hace eco

Ha llegado hasta tal punto que la INTERPOL ha publicado una documentación este Agosto en la que desvela la contaminación por el crimen organizado. En donde señalan que las redes de delincuencia organizadas constituyen negocios multimillonarios que operan en varios ámbitos delictivos y parece ser que hay un aumento de la criminalidad en el sector de los residuos plásticos, justo después de que China prohibiera la importación de plástico no reciclable.

El comercio ilegal de residuos atraviesa fronteras.
El comercio ilegal de residuos atraviesa fronteras.

Se desvela que se está permitiendo que empresas que han cometido delitos graves de envío de residuos contaminados sigan exportando. Porque supuestamente aunque la exportación de residuos que no se puede reciclar es ilegal en todas las circunstancias, existen excepciones en donde se puede incluso recibir subvenciones.

Así que se convierten en mercancía en donde los corredores de reciclaje buscan compradores que quieran derretir el plástico, convertirlo en gránulos para crear algo nuevo. Pero lo que reciben son desechos inclasificados como escoria mineral, plásticos sucios, desechos electrónicos, desechos de caucho, desechos municipales, ropa, papel, pilas y desechos de metal… así que se acumula y se va haciendo «desaparecer».

El caso de Malasia

A principios del 2019 era raro que no empezaran los telediarios de este país sin mencionar el constante aumento de toneladas de residuos plásticos enviados por otros países, interceptados en el puerto.

En respuesta a esto, Malasia se convirtió en el primer país en repatriar -hasta el momento- 150 containers de desechos plásticos ilegales. Entre los cuales se encuentran 10 containers españoles y, según mis fuentes, 5 salieron de Valencia aunque no se dirigieron directamente a Malasia sino que pararon primero en EEUU. Se entiende que es debido a la intencionalidad de desviar y crear opacidad en la trazabilidad.

Yeo Bee Yin, La ministra de Energía, Ciencia, Tecnología, Medio Ambiente y Cambio Climático
Yeo Bee Yin, La ministra de Energía, Ciencia, Tecnología, Medio Ambiente y Cambio Climático

Gracias a esta mujer Yeo Bee Yin, que salía a principios del año pasado 2019 en la televisión advirtiendo al pueblo malayo que «no dejará ser el vertedero de desechos plásticos del mundo», mensajes como que «los países desarrollados deben hacerse cargo de sus propios desechos» lograron concienciar a la población y desvelaron el gran tráfico ilegal de plástico no reciclable.

Gracias a ella el gobierno de Malasia tomó medidas severas para combatir el movimiento ilegal de desechos plásticos, iniciando una guerra al plástico no reciclable desde los puertos, que es por donde entra.

Muchos contenedores detectados como importados ilegalmente permanecen en puerto durante meses, pero cuando las empresas ilegales logran eludir a los funcionarios de aduanas y salen con el cargamento… entra la siguiente historia.

¿Dónde están los vertederos ilegales de Malasia?

Si alguna vez has aterrizado en Kuala Lumpur, recordarás esas enormes extensiones de palma aceitera. Este tipo de plantaciones han invadido completamente el paisaje malayo, pero es que además los límites de estas propiedades están blindados.

Resulta que gracias al documento-reportaje realizado por GREENPEACE Malaysia en 2018, después de las denuncias de los vecindarios afectados, se destapó varios vertederos ilegales. La inmensa mayoría se encuentran entre las plantaciones de palma, otros se encuentran cerca de plantaciones de té o cerca de embalses que se usan para la agricultura. De hecho, el año pasado, uno de los embalses sufrió varios episodios de peces muertos en su superficie y creo que es fácil entender la relación.

Las imágenes satelitales y los drones demuestran que los vertederos han aumentado en el último año.
Las imágenes satelitales y los drones demuestran que los vertederos han aumentado en el último año.

También se descubren que existen vertederos ilegales de larga duración, como Sungai Muda instalado desde el 2008, lo que hace sospechar que tiene la complicidad de los encargados del municipio.

Lo peligroso no es lo que se ve, sino lo que no se ve

La incineración ilegal libera químicos debido a la descomposición de pirólisis, así como metales pesados y tóxicos. La quema de plásticos provoca que distintas formas químicas se conviertan en más contaminantes. Los hidrocarburos aromáticos son subproductos de la descomposición térmica y se sabe que son cancerígenos.

Todos estos efectos los sufren las comunidades locales, los vecindarios que rodean a estos lugares. Ellos comenzaron un movimiento para denunciar el aumento de vertederos a cielo abierto que repentinamente -en el 2018 y 2019- empezaron a rodear sus viviendas y en muchas ocasiones eran empresas de fuera -chinas- las que se estaban trasladando a Malasia.

Este aumento de las importaciones de desechos plásticos deja en evidencia la falta de capacidad para gestionar nuestros residuos y que la cantidad es tan abundante que ya es difícil de controlar.

El cambio tiene que ser estructural de las políticas y las empresas

Por más que los concienciados, con nuestra buena intención nos juntemos para limpiar las playas, si la producción de plásticos no se limita esto no tiene sentido. Es por eso que ya no vale el culpar a los consumidores -cuando no hay ni opción- no es nuestra culpa, porque no es el mercado.

Somos muchos los que reclamamos menos envoltorios o que se deje de abusar de envoltorios innecesarios pero no nos hacen caso.

Si el precio de comprar una nueva pieza de plástico virgen es mucho más barato que aquella reciclable, obviamente el costo ambiental en este juego tiene las de perder.
Si el precio de comprar una nueva pieza de plástico virgen es mucho más barato que aquella reciclable, obviamente el costo ambiental en este juego tiene las de perder.

Así que el cambio viene determinado por la voluntad de tu gobierno -municipal y/o estatal- premiando o incentivando a los que lo hacen bien, forzando de esta forma al mercado. También tú como consumidor puedes crear presión sobre el mercado evitando que todo acabe en vertederos e incinerado.

Estamos globalizando hasta nuestros desechos

Creo que es una irresponsabilidad por nuestra parte permitir este tipo de políticas de reciclaje desde los países occidentales, fomentando que resulte más rentable exportar los residuos plásticos que clasificarlos adecuadamente dentro de cada frontera.

Esto desvela que nuestra capacidad de reciclaje es insuficiente para tratar todos nuestros residuos y principalmente es debido a que no hay una verdadera voluntad de querer crear la capacidad para hacerlo.

Así que el resultado es que sale más económico mandar una tonelada fuera de tus fronteras, que intentar reciclarlo en nuestro país.

REDUCIR nuestro consumo de plástico

Usamos países como vertederos plásticos limpiando nuestra conciencia occidental con cubos de colores que desaparecen de nuestra vista y pensamos que hemos hecho el bien. Lo que demuestra que vivimos en un mundo caótico disfrazado de ordenado. 

Las multinacionales petroquímicas y las empresas fabricantes deberían aceptar su responsabilidad de reutilizar o reciclar sus desechos. Al final la mala gestión a nivel internacional está dañando el medio ambiente y los océanos que son el sumidero final.

Tu basura también viaja ¿A dónde van nuestros residuos plásticos?
Tu basura también viaja ¿A dónde van nuestros residuos plásticos?

Así que debemos de REDUCIR nuestros residuos plásticos, es lo básico que a nivel individual podemos focalizarnos para ayudar a combatir esta problemática. Hay envoltorios que no necesitamos y hay muchos artículos que pueden ser sustituidos por otro tipo de compuestos más biodegradables.

Estarás de acuerdo conmigo en que cada país debe hacerse responsable de sus propios residuos. Tal vez ha llegado el momento de dejar de ver al plástico como un residuo y empezar a verlo como un recurso.

La ruta natural, por María Marcos
La Ruta Natural, por María Marcos
1400 933 María Marcos

Dejar una Respuesta

Start Typing

Preferencias de privacidad

Cuando visitas nuestro sitio web, éste puede almacenar información a través de tu navegador de servicios específicos, generalmente en forma de cookies. Aquí puedes cambiar tus preferencias de privacidad. Vale la pena señalar que el bloqueo de algunos tipos de cookies puede afectar tu experiencia en nuestro sitio web y los servicios que podemos ofrecer.

Por razones de rendimiento y seguridad usamos Cloudflare.
required





Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias mediante el análisis de tus hábitos de navegación. Si continuas navegando, consideramos que aceptas su uso. Puedes cambiar la configuración u obtener más información aquí