Hace años que conocemos el Albergue el Refugio, un impresionante albergue/pizzería incrustado en una montaña de Montanejos (Castellón) a orillas del río Mijares. Es propiedad de nuestro amigo y gran escalador Ernesto López, que si algo nos tiene que enseñar a parte de escalada es a viajar alrededor del mundo buscando paredes a las que subir; años y años de viajes le han permitido conocer decenas de países a lo largo de los último 25 años. Como no pudimos coincidir en Tailandia hace unos meses nos dimos la palabra de vernos en Montanejos y de paso hacer nuestra primera incursión en el mundo de la escalada con cuerda.
El Albergue el Refugio es una especie de hotel/casa rural que surgió de la necesidad de albergar a escaladores que venían a Montanejos a escalar. Hace 30 años que Ernesto descubrió esta zona muy apta para la escalada y decidió empezar su construcción. A parte de dormitorio compartido con camas para hasta 10 personas dispone de habitaciones, zona de acampada, cabañas de madera y jaimas marroquíes. Dando un vistazo a los adornos del local te das cuenta de que estamos delante de un viajero; banderitas nepalíes, lámparas indias, esculturas de buda, maderas talladas americanas, etc…
Nosotros elegimos una de las cabañas de madera para 2 parejas pero que disfrutamos solos. Las vistas desde nuestro balcón eran espectaculares, pero es que la ubicación del albergue hace que desde cualquier punto del local tengas buenas vistas. Es uno de los puntos fuertes del Refugio.
Una vez acomodados había que dar caña a la escalada. Para nosotros era el primer contacto con arneses, cuerdas y pies de gato, así que tocaba recoger el equipo e irnos a un par de vías de grado 4 para principiantes donde aprender lo básico de la escalada.
La seguridad ante todo, así que Ernesto nos explicó la forma de atarnos (con el doble ocho que aprendimos a hacer), la forma de utilizar el gri-gri, como pasar la cuerda en las cintas, etc…
Una vez aprendido lo básico empezamos a subir la primera vía, «La verdulera del pakistaní», una subida de 20-22 metros de grado 4, bastante facilito para cualquier escalador pero que para nosotros era nuestro estreno en el mundo de escalada. En Montanejos hay miles de vías, la gran mayoría (por no decir casi todas) abiertas por Ernesto a lo largo de su vida.
Subimos una segunda vía, «Atrapado en cuarto grado», donde ya empezamos a dejar atrás los miedos de la altura y nos centramos en el espectacular paisaje que se abre ante ti a esa altura.
Una vez subidas las dos vías nos comimos unos bocatas y fuimos a dar una vuelta para ver el estrecho del Mijares, una zona con unas paredes de más de 100m de altura y separadas entre sí por el río Mijares. La verdad es que eran espectaculares, y más cuando nos dijo Ernesto que las vías que habían para escalar estas paredes estaban abiertas por él la mayor parte de ellas. Los que tengáis vértigo vais a flipar…
Luego fuimos a ver el pantano de Arenoso, a muy poca distancia del Albergue. Contemplar sus aguas color turquesa después del desgaste físico escalando nos dejaron un rato aplatanados contemplando aquella zona. Ni que decir tiene que en la zona se respira una tranquilidad que ni te cuento, otro de los puntos fuertes de esta zona.
Ya de vuelta, y desde el albergue, pudimos contemplar la Fuente de los Baños, un lugar del río que se ha convertido en piscinas naturales donde la gente se baña como en la playa. Sus aguas cristalinas y medicinales hace que la afluencia de público esté asegurada. Tanto como si quieres darte un baño o simplemente darte un paseo junto al cauce del río en esta zona vas a estar en contacto con la naturaleza al 100%.
Ya de vuelta en el Albergue el Refugio teníamos una sorpresa preparada: una vía de grado 6+ llamada «Apagaelfacebook.com», con la que terminaríamos el día de escalada con Ernesto. La vía, junto con otras más, estaban en el mismo albergue, justo a lado de nuestra cabaña de madera.
La subí pero casi arriba me quedé sin fuerza en los brazos. Ernesto me ayudó en todo lo que pudo con sus ánimos y consejos y, aunque con trampa porque aunque no caí sí que descansé un par de veces colgado de la cuerda, llegué arriba. Para ser el primer día de escalada ya estaba bien, pero te das cuenta que hay que tener mejor preparación física y saber dosificarla para acometer vías superiores a tu nivel, así como disponer de técnica.
Terminada la odisea fuimos un poco más arriba donde Ernesto dispone de una roca donde ha creado un rocódromo en una de las paredes donde entrenar movimientos y mejorar tu técnica. ¡¡Todo sin salir del refugio!!
Y para terminar qué mejor que una buena comilona. La pizzería/restaurante del Albergue el Refugio dispone de una carta repleta de pizzas y tapas impresionante. Es el corazón del albergue y se compone de una terraza con vistas de Montanejos y de una zona climatizada. Comer aquí es la guinda a un día de escalada o de paseos por los alrededores.
Ahora que llega le verano os recomendamos una visita al Albergue el Refugio para hacer una pausa en nuestras vidas y de paso disfrutar de la naturaleza. En su página de facebook suele poner ofertas que seguro que le van bien a más de un@.
Carolina says:
¿Alguien me puede dar un teléfono o email de contacto del albergue para preguntar? Muchas gracias!!!
Toni Ródenas says:
Hola Carolina, en su web tienes todos los datos, pero te lo dejo aquí: 964 13 13 17
Un saludo