Hay muchas maneras de descubrir la montaña, pero pocas tan auténticas como hacerlo a lomos de un caballo. Las rutas a caballo de Anima Equi te invitan a adentrarte en el corazón del Pirineo aragonés, recorrer antiguos caminos y disfrutar del paisaje al ritmo pausado del trote.
Son actividades pensadas para todas las edades y niveles, ideales tanto para quienes se suben por primera vez a un caballo como para jinetes con experiencia. Los animales son dóciles, están perfectamente entrenados, y los guías —profundos conocedores del terreno— garantizan seguridad, diversión y confianza desde el primer minuto.
En pleno Valle de Benasque, uno de los rincones más espectaculares del Pirineo, Anima Equi organiza rutas que combinan naturaleza, aventura y tradición. Aquí se alzan las cumbres más altas de España, como el Aneto (3.404 m), el Posets o el Perdiguero, y cada recorrido ofrece una mirada diferente sobre este entorno privilegiado.
Cabalgando entre prados alpinos, bosques de abedules y antiguos pueblos de piedra, el paisaje cambia a cada paso. Los senderos atraviesan valles glaciares, cascadas y miradores naturales desde los que se domina la inmensidad del Pirineo.
Una experiencia de dos días que asciende desde el pueblo medieval de Anciles hasta los valles del Ampriu y del Ardonés, con vistas espectaculares del macizo de la Maladeta.
Entre cascadas, ibones y praderas alpinas, esta ruta combina la emoción de la altura con la serenidad del paisaje. Perfecta para quienes buscan una aventura corta, segura y adaptada a todos los niveles.
Una travesía de ocho días que recorre los macizos del Aneto, el Posets y el Perdiguero, atravesando pueblos con historia, puentes medievales y praderas infinitas.
Cada jornada se adapta al ritmo del grupo y los caballos descansan al final de cada etapa. Es la mejor opción para quienes quieren sumergirse de lleno en la vida de la montaña, con todas las comodidades y la guía de expertos locales.
En solo día y medio, esta ruta combina naturaleza, historia y un toque de misterio. Desde Anciles hasta Cerler, se recorren antiguos caminos de herradura y enclaves envueltos en leyendas, como el Macizo del Turbón, donde se dice que las brujas del valle celebraban sus aquelarres.
Una escapada perfecta para familias o grupos que buscan una actividad divertida, segura y diferente en plena naturaleza.
Montar a caballo por el Pirineo no es solo una actividad: es una manera de reconectar con el entorno y con uno mismo.
El equipo de Anima Equi cuida cada detalle —desde la elección del caballo hasta la seguridad en ruta— para que la experiencia sea cómoda, relajada y adaptada a todos los participantes, sin importar la edad o la experiencia previa.
Los itinerarios están disponibles entre junio y octubre, cuando el clima es más suave y los valles lucen su máximo esplendor. Durante esos meses, los días son largos, las noches frescas y el paisaje se tiñe de verdes, azules y dorados imposibles de olvidar.
Ya sea tu primera vez montando o una nueva aventura en la montaña, las rutas de Anima Equi ofrecen la combinación perfecta de naturaleza, seguridad y diversión.
Porque hay paisajes que se pueden ver… Y otros, como el Pirineo, que solo se viven a caballo.