Puerto Princesa, qué ver y hacer en esta ciudad de Palawan

Puerto Princesa es la capital de la provincia de Palawan, una isla de forma alargada situada al sudoeste de Filipinas. Pese a que mucha gente tan solo visita El Nido cuando llega a esta zona del país, si el tiempo no apura y se dispone de varios días para recorrer la isla, esta ciudad tiene algunas cosas que ofrecernos.

Puerto Princesa fue la primera parada de nuestra segunda escapada por el país y a la que llegamos muy emocionados con la visita de nuestros amigos Noelia y Damián, con los que celebramos la Navidad. Pese a que nuestra intención era ir hacia el norte, aprovechamos y pasamos un par de días por la zona tomando contacto. Pero, ¿qué se puede hacer en Puerto Princesa? La verdad es que la ciudad en sí no ofrece demasiado al turista, pero sus alrededores sí.

Lugares para visitar en Puerto Princesa

Playa de Nagtabon

Alquilar una moto y visitar esta playa situada a 24 km en la costa oeste. En el tramo final antes de llegar a la playa hay que salir de la carretera y meterse por un camino de piedras empinado y algo difícil de recorrer. Pese a que nosotros fuimos con la moto hasta la playa, el propietario de la guesthouse donde habíamos alquilado la moto nos dijo que si no nos atrevíamos a bajar con ella podíamos dejarla en la parte alta, que nadie la robaría. En total son unos 40 minutos de recorrido y lo más engorroso es salir de Puerto Princesa por culpa del tráfico.

El último tramo del camino
El último tramo del camino

Se trata de una bonita playa poco concurrida, cobijada por muchas palmeras, alguna cabaña y un resort en una esquina. El agua es clara y la tranquilidad absoluta, pero no es una de esas playas de agua turquesa y arena blanca que uno pueda imaginar cuando escucha hablar de Filipinas.

En la entrada a la playa hay un chiringuito donde se puede comprar alguna cerveza o algo para picar, y según nos dijeron, si traes tu comida puedes asarla allí mismo.

La playa de Nagtabon de Puerto Princesa
La playa de Nagtabon de Puerto Princesa
Otra vista de la playa
Otra vista de la playa
Sus aguas si no hay mucho oleaje
Sus aguas si no hay mucho oleaje

Parque Nacional del río Subterráneo de Puerto Princesa

Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1999. Nuestra intención en un principio era ir hasta Sabang y desde allí acceder al río por nuestra cuenta, no obstante, después de ir en una excursión organizada desde Puerto Princesa creemos que esta opción es mucho más cómoda. Hay que pedir un permiso de entrada el día de antes, y las colas que se forman son tan largas que uno al final termina pasando allí todo el día. La ventaja de ir en grupo es que mientras ellos estaban pendientes de todo el papeleo nosotros pudimos ir a ver el manglar y comer tranquilamente hasta la hora de entrar (y además nos ahorramos tener que desplazarnos hasta Sabang a dormir, donde no parecía que hubiese mucha oferta de alojamiento).

En el puerto de Sabang, un bangka (embarcación típica de Filipinas) te recoge y te deja en una playa cerca de la entrada a la cueva, desde allí solo hay que andar un par de minutos hasta llegar al río.

La playa donde te deja el bangka
La playa donde te deja el bangka

La travesía dura algo más de media hora y el bote en el que caben 8 personas más el conductor, recorre más de un kilómetro de los ocho que son navegables. El paseo es muy tranquilo pues la barca no lleva motor y es arrastrada por remos. Equipados con un casco, chaleco salvavidas, una enorme linterna que maneja el que encabeza el bote y unos auriculares en los que uno va escuchando la explicación de la formación de la cueva y su historia, uno disfruta de un agradable paseo por este río subterraneo que atraviesa una cueva de piedra caliza salpicada de estalactitas, estalagmitas y mucha más vida que la que uno puede imaginar.

Entrada al río subterráneo de Puerto Princesa
Entrada al río subterráneo de Puerto Princesa

Manglar de Sabang / Mangrove paddle boat tour

La excursión por este manglar la hicimos de pura casualidad: faltaban por lo menos un par de horas hasta que pudiésemos entrar al río subterráneo y queriendo matar el tiempo fuimos aquí a parar, a un par de km de dónde se coge el bangka para ir al río subterráneo. Pese a que no es demasiado espectacular y el color del agua es sospechoso, fue una mini excursión muy entretenida gracias al guía que nos acompañaba, que a parte de contarnos cosas interesantes y de mostrarnos la fauna autóctona, nos deleitó con una canción al final del trayecto con percusión incluida.

En el manglar
En el manglar

Datos prácticos de Puerto Princesa:

Dónde comer

En Puerto Princesa, al igual que en Manila, hay decenas restaurantes de comida rápida: chowking, jolibee, mac donalds, pizzerías, dunkin donuts… En la calle principal es casi imposible encontrar otra cosa, pero por suerte hay un par de lugares que no tienen nada que ver, que probamos y queremos recomendar:

Kalui: Encontrar este restaurante fue toda una sorpresa (más todavía teniendo en cuenta que era el día de Navidad y la Nochebuena la habíamos celebrado en el suelo de un feo hotel de Manila comiendo pizza). La decoración de Kalui no pasa desapercibida ante los ojos de ningún visitante: uno tiene que dejar su calzado en la entrada antes de pisar el suelo de madera, las paredes están decoradas con llamativas esculturas, y todo está adornado con un gusto exquisito. Incluso el baño, que está increíblemente limpio, es acogedor.

Hay muchas mesas y cabe mucha gente, pero aun así es recomendable reservar con antelación porque se llena, y la verdad es que no nos extraña nada, la comida está exquisita. Seguramente no se adapte a todos los presupuestos, pero bien merece la pena para una ocasión especial como la nuestra: después de mucho tiempo fuera de casa recibíamos la visita de unos amigos. En el menú predomina el pescado y marisco fresco, pero como anécdota decir que algo que me impresionó muchísimo y me encantó fueron las algas que acompañaban a algunos platos.

En el restaurante Kalui
En el restaurante Kalui
Nuestra foto de Navidad con Noelia y Damián
Nuestra foto de Navidad con Noelia y Damián

Ima’s vegetarian: Si hay un restaurante vegetariano, tenemos que probarlo. Este pequeño local, de decoración sencilla y que pasa casi desapercibido, sirve unos platos vegetarianos muy buenos. Las raciones son, quizás, demasiado justas y puede que con un plato os quedéis con hambre, pero esto no es un problema teniendo en cuenta la variedad de platos: pasta, pizza, burritos, platos de verdura, ensaladas y zumos de muchos sabores.

La carta de platos vegetarianos
La carta de platos vegetarianos

Dónde dormir

Dallas Inn fue nuestra elección en Puerto Princesa, un hostal muy sencillo y de habitaciones diminutas con baño propio (también hay un dormitorio) por 600 pesos. En la entrada hay un jardín y en la primera planta una zona común. Dispone de agua filtrada y agua caliente para hacer café. Llegar hasta éste desde el aeropuerto nos costó 50 pesos, pero hay que salir fuera del mismo para regatear con alguno que pase, pues lo que hay allí aparcados suelen cobrarte más.

Datos prácticos de Puerto Princesa:

  • Alquiler moto por un día: 500 pesos por una automática o 550 pesos por una de marchas
  • Precio excursión Río Subterráneo desde Puerto Princesa: 1500 pesos por persona e incluye comida, entrada, transporte y tasas
  • Para llegar a Puerto Princesa puedes pillar vuelos económicos con Air Asia y Cebu Pacific desde distintas ciudades de Filipinas.

Localización

Otros destinos de Filipinas

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5 comentarios
  • Hola! Quería saber con que compañía reservasteis la excursión a las cuevas de puerto princesa, porque yo estoy mirando civitatis pero hace la excursión por 45 €, me parece bastante caro… Quizá es mejor cogerlo allí? Espero respuesta, si puede ser via e-mail. GRACIAS! :)

  • El hostel donde os quedasteis ahora se llama Tropic Dahlia hostel, y ahora lo lleva un chico polaco (pablo) y Via (filipina de PPS) y son super atentos,

  • Algo muy interesante para visitar es Iwaigh Penal Farm.. Es una cárcel pionera a nivel mundial… Yo estuve este verano y me encantó la experiencia de visitarla :)

  • El río subterráneo es tremendo, el más largo del mundo. Quizá os lo contaron, pero hace poco unos espeleólogos han deducido que debajo de este río tiene que haber por fuerza otro similar teniendo en cuenta la cantidad de agua que entra frente a la que sale. Todo un mundo subterráneo.

    • Sí! todo un mundo que realmente nos sorprendió. La verdad es que el hecho de que los auriculares tuviesen la opción de escuchar la explicación en castellano y ser conscientes de la magnitud del río ayudó a que la visita fuese todavía mejor. Fue larga la espera pero valió la pena.

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