Ropa para viajar por el sudeste asiático. ¿Qué me llevo?

Pantalones

Seguramente en lo primero que pienses cuando estés preparando la mochila para visitar esta parte del mundo sea en sus altas temperaturas. Sí, en el sudeste asiático hace calor, así que pilla un pantalón corto para los días de playa, para las excursiones en moto, para los días en los que hace 30 grados a la sombra…

Sin embargo hay momentos y lugares que requieren cubrirse las piernas y uno de ellos es entrar a los templos. Es verdad que en muchos ofrecen pareos y telas para taparte, pero en lugares menos turísticos no. Para esas ocasiones basta con llevar un pantalón que cubra las rodillas.

Recomiendo también un pantalón largo para las noches en los lugares en los que hay muchos mosquitos, sobre todo si te molesta ir siempre pringado de repelente, te protegerá de sus picotazos (menos de los de Koh Tao, que atraviesan cualquier tipo de tela).

En mi caso a mí me gusta llevar unos joggers o de estilo alibaba, que suelen ser muy fresquitos, te los puedes subir hasta la rodilla y usarlos tanto de día como de noche y así tienes un dos en uno.

Los leggins ocupan lo mismo que unos calcetines gordos en la mochila. Los pantalones largos te harán falta también si vas al norte de Tailandia, Laos o Vietnam en los meses más frescos, que suelen ser de noviembre a febrero.

Y si tienes pensado hacer algún trekking no olvides meter un pantalón adecuado de senderismo o algo cómodo de deporte como, otra vez, las mallas. 

¿Cuántos pantalones en total? Eso depende del bulto que estés dispuesto a cargar en la mochila. Yo si tuviese que hacer ahora mismo la mochila para ir unas semanas al sudeste asiático metería un par de pantalones cortos, uno largo y como mucho unos de alibaba que se puedan subir hasta la rodilla.

Camisetas

De manga corta o de tirantes. Las primeras para cuando necesites protegerte un poco del sol, para entrar a templos, para ir en moto o bicicleta y no quemarte la espalda y los hombros y las segundas para lugares de playa o días de muchísimo calor.

Recomiendo también no olvidar una camiseta de manga larga para lugares en los que refresca*, las estancias en aeropuertos, las noches en autobús o tren, para cuando estás en una terracita por la tarde y los mosquitos se ponen pesados…

Si no vas a ir a lugares en los que sí que hace frío*, no hace falta llevar nada más abrigado porque va a ser un bulto en la mochila que no vas a utilizar.

¿Cuántas camisetas? Para ser práctico yo no metería más de 4 (2 de manga corta y dos sin tirantes) y una de manga larga, aunque yo siempre acabo pecando y metiendo más. Toni para esto es mucho más práctico; recuerda que en cuanto al peso de la mochila menos es más.

Pero sobre todo pilla ropa que sea muuuuuy cómoda, piensa que vas a pasar muchas horas andando de un sitio para otro, en transporte público, esperando algún autobús… Y si son prendas a las que no tengas demasiado cariño mejor, porque en las lavanderías te las pueden estropear o si vas a zonas rurales pueden terminal llenas de agujeros.

Sudadera o chaqueta, ¿hace falta?

Si viajas durante los meses de noviembre-diciembre a febrero a lugares como el norte de Tailandia, Laos o Vietnam prepárate para tener que taparte por las noches. Nosotros usábamos nórdico cuando vivíamos en Chiang Mai, y en Pai pasamos frío durmiendo en una cabaña en febrero.

Sin embargo, como puedes imaginar, su invierno no es tan crudo como el nuestro y con una chaqueta tipo una sudadera, es más que suficiente para abrigarte.

Calzado

Durante años nuestro calzado en las mochilas se limitó a llevar unas chanclas y unas zapatillas de montaña para cuando teníamos que hacer rutas de senderismo o trekkings de varios días.

Con las chanclas íbamos a todas partes, pero es verdad que hacíamos viajes “muy rurales” en los que nunca nos sentíamos demasiado “tiraos”, y además, en la mayoría de sitios hay que descalzarse para entrar.

Sin embargo, si vas a visitar ciudades como Singapur, o tienes pensado hacer visitas más culturales, ver museos… no es mala idea añadir unas sandalias o unas zapatillas de lona (algo que no te dé mucho calor y que sea fácil de quitar y poner) para camuflar un poco ese eterno look de playa.

Ropa interior

Con 4 o 5 bragas/calzoncillos tienes suficiente. Ten en cuenta que hay servicio de lavandería en todas partes y que, si no, siempre puedes meter una pastilla de jabón en el neceser y lavar a mano.

Con respecto a los calcetines para nosotros más de dos pares es cargar bulto de más. Tener “quita-y-pon” es suficiente porque solo los utilizamos para los días de caminatas y ahí los vamos lavando a mano sobre la marcha.

Y finalmente, a mí me gusta llevar un par de sujetadores, uno de ellos más sport para los días en los que el ejercicio entra dentro de los planes.

Ropa de baño

Es más que probable que durante tu viaje por el sudeste asiático termines nadando, ya sea en una playa de Filipinas, un lago o unas cascadas, pero con un bikini o bañador tienes suficiente.

Si no quieres salir en todas las fotos igual, siempre puedes recurrir a las prendas reversibles, una parte de abajo y dos de arriba o un bikini negro que es muy sufrido, pasa desapercibido y nadie se dará cuenta de que siempre es el mismo…

Pareo-pañuelo

Esta es una prenda comodín, un pañuelo grande o un pareo que puedas usar para taparte el cuello o para ir a la playa. Por supuesto que puedes llevar una cosa de cada, pero si encuentras una que valga para las dos cosas, llevarás un bulto menos en la mochila.

Gorra, gorro, sombrero..

El sol pica en el sudeste asiático, así que puede que una gorra, un gorrito de pescador o un sombrero terminen siendo tu mejor aliado. Mejor si es de tela para poderlo meter en la mochila doblado.

Poncho o impermeable

Si vas a ir en pleno monzón, sobre todo si tienes pensado hacer trekking, incluye un chubasquero o poncho en la mochila. Si te pilla el agua en medio de la nada acabarás empapado, te lo aseguramos.

Si vas a hacer una ruta en moto o en bici asegúrate de llevar un buen equipo impermeable o tendrás que improvisar como nosotros y comprarlo sobre la marcha. Por suerte para nosotros en Vietnam es algo que vendían en todas partes…

Bolsa tipo red para la ropa sucia

A nosotros nos gusta llevar una redecilla para la ropa sucia y siempre la llevamos a la lavandería con la esperanza de que nos devuelvan las prendas dentro de ésta (y no en una bolsa de plástico), pero de momento ese día todavía no ha llegado…

De todas formas va muy bien llevar algo para tener junta toda la ropa para lavar y en el momento que encuentres un servicio de lavandería solo tienes que sacarla de la mochila.

Resumen y conclusión

Esto es más o menos la ropa para viajar que solemos llevar en la mochila. En algunos viajes hemos llevado más y en otros menos y, como ya he dicho, a veces pecamos y metemos algún “por si acaso” que lo único que hace es ocupar sitio en la mochila.

Recuerda que hay servicio de lavandería en prácticamente todos los pueblos y si no siempre puedes lavar tu la ropa a mano si tienes una emergencia.

Con respecto a la mochila, ya lo hemos comentado en alguna ocasión, y después de haber utilizado varias consideramos que 50 litros es el tamaño máximo. Si llevas una más grande la terminas llenando de cosas que no vas a usar y es un peso más que tienes que cargar en la espalda.

En resumen, nuestros tres principales consejos son:

• Menos es más, busca prendas que valgan para diferentes ocasiones
• La comodidad ante todo, se puede salir igual de guapo en las fotos; effortless chic ;)
• No lleves prendas que te sepa mal que se estropeen

*Lugares en los que puede hacer frío: El norte de Tailandia, de Laos y de Vietnam entre noviembre-diciembre y febrero

*Lugares en los que refresca: los autobuses de Malasia, el tren nocturno de Tailandia con aire acondicionado, plantaciones de té como Cameron Highlands, los 7/11.

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