Uno de los lugares más emblemáticos de Kampot es la estación de montaña de Bokor, y dentro de este lugar lo que más llama la atención del visitante es el hotel-casino Bokor Palace. Este edificio, construido en 1925, albergaba en su interior a los franceses coloniales y a camboyanos adinerados.
Si desde fuera ya parece tétrico esperad a entrar dentro. Sus pasillos son de lo más “acogedores”, con restos de azulejos medio rotos y paredes llenas de humedad que muestran distintas texturas.
Mientras estás en el interior de estos pasillos oyes ruidos de lo más extraños, pero no os preocupéis, es solo el viento cuando pasa entre las ventanas llenas de cristales medio rotos.
Llegamos a una de las suites donde un imponente mirador con las ventañas ya sin cristal nos invita a imaginarnos el lujo que debió albergar en su época de máximo explendor.
Algunas de las suites disponen de una terraza-mirador donde poder estar a la luz de las estrelllas (o del viento reinante en la zona). El musgo llena de color las piedras de los muros dando mayor énfasis al estado de abandono.
Es muy común también encontrar algunos muros repletos de un líquen de color naranja que llena de contraste algunas ennegrecidas paredes.
Volviendo al interior, y al final de un pasillo, la ténue luz que entra en el oscuro Bokor Palace deja imágenes un tanto tétricas como la siguiente.
La sala donde se encuentra la chimenea es simplemente espectacular, en cuanto a tamaño como en arquitectura.
Y para terminar solo decir que la mayor parte del año en este lugar hay mucha niebla que hace que el lugar sea de lo más fantasmagórico y tenebroso…
Hola Marta, gracias por tu comentario. Precisamente en Madrid estamos ahora mismo; salimos mañana hacia Marruecos para mostraros más información para viajar de mochileros. No te puedes imaginar lo que nos sube la moral estos comentarios. Gracias otra vez!!!!