¿Te estás preguntando qué ver en Hanoi? Además de ser la capital de Vietnam y puede que incluso punto de entrada o salida de tu viaje por el país, esta emblemática ciudad ofrece varias opciones en las que entretenerse por lo menos un par de días haciendo turismo (tiempo mínimo que te recomendamos estar).
Así que ¡hazlo!, no lo pases por alto y antes de seguir tu aventura por el país, detente a disfrutar de esta ciudad en la que, además de ver muchos museos, te perderás entre tiendas y callejuelas y te quedarás prendado de sus templos y ciudadela. A continuación una lista con las 15 cosas que ver en Hanoi, así que toma nota.
Qué ver en Hanoi
Old Quarter
No hay nada como empezar la visita a la ciudad recorriendo el Old Quarter, para nosotros el imprescindible que ver en Hanoi por guardar la esencia de Vietnam concentrada en un laberinto de retorcidas y estrechas callejuelas llenas de tiendas, hostales y puestos de comida local.
No en vano son muchos los viajeros que escogen la zona para alojarse durante su estancia en la capital, además de por los buenos precios.
Una de sus peculiaridades es que cada una de sus calles se conoce con el nombre del producto que se vendía cuando ésta era una zona de comerciantes y artesanos (por eso empieza con la palabra hàng, que significa mercancía o tienda) y algunas de estas todavía conservan esta característica.
Es un buen lugar para aprender a cruzar las calles llenas de motos siguiendo sus propias normas y para probar la Bia Hoi, la cerveza fabricada a diario en Vietnam, una de las más baratas del mundo.
Lago Hoan Kiem
Hoan Kiem (Hoàn Kiếm) es un distrito transitado de Hanoi y su lago uno de sus grandes atractivos, un lugar que regala algo de paz a una urbe atestada de motos que parece no descansar.
El nombre, que traducido significa “Lago de la espada restituida”, se lo debe a una antigua leyenda que cuenta que Le Loi, emperador vietnamita, le devolvió a una tortuga mágica la espada que usó para expulsar a los chinos de su país.
Mitos aparte, en los alrededores del lago Hoan Kiem la actividad empieza cuando por la mañana se llena de gente que va a hacer Tai Chi y durante el día recibe a los curiosos turistas que lo recorren y visitan la pagoda que hay en su superficie. Es un buen lugar al que ir a hacerse un cà phê, pues está rodeado de cafeterías típicas.
Las noches de los fines de semana se cierra la calle al tráfico y la zona, iluminada, se convierte en un punto de encuentro de gente que pasea, viajeros, músicos y artistas.
El Templo de la Literatura
Uno de los lugares más emblemáticos y visitados de Hanoi es el Templo de la Literatura o Văn Miếu, fundado en 1070 por el rey Ly Thanh Tong.
Está dedicado a Confucio y, durante siglos, hizo a la vez de universidad, la primera de Vietnam. Fue establecida y construida en la parte posterior del templo y, en un principio, solamente príncipes y gente de la realeza podían estudiar en ella, aunque poco a poco se fue abriendo a los mejores estudiantes del país.
Pocos eran los que conseguían acabar sus estudios (2313 en 700 años de historia), y aquellos que lo hicieron poseen todavía el honor de tener sus nombres esculpidos en losetas dentro del mismo templo.
El recinto del templo, que suele estar repleto de turistas y de políglotas guías por ser uno de los puntos más populares que ver en Hanoi, lo forman cinco patios con varios edificios y altares.
Ciudadela de Hanoi
La Ciudadela de Hanoi o Hoàng Thành Thăng Long fue construida en el siglo XI por la dinastía Viêt y es Patrimonio de la Humanidad desde 2010.
En el recinto se pueden pasar perfectamente un par de horas recorriendo el palacio, el búnker, alguna exposición de pintura tradicional e incluso excavaciones arqueológicas.
Además, es fácil encontrar parejas de novios que han elegido el emblemático lugar para su reportaje de fotos, ¡curioso!
Marionetas de agua
Considerado como un espectáculo tradicional imprescindible por unos, y como una cutrez por otros, lo cierto es que las marionetas de agua han conseguido sobrevivir durante siglos y a día de hoy siguen siendo muchos los turistas que acuden a verlas.
Hablamos de las marionetas acuáticas de Hanoi, unos curiosos títeres de madera flotantes que representan aspectos de la vida tradicional vietnamita como la cosecha del arroz, la pesca y algunas de sus leyendas.
Su nombre original es roi nuoc y se cree que en su origen se inspiraron en los maniquíes que los campesinos instalaban en sus cultivos, habitualmente inundados. Recuerda comprar las entradas con tiempo porque suele llenarse siempre.
Prisión de Hoa Lo
Aunque hoy solo queda un pequeño trozo de ella debido a la construcción de las Torres de Hanoi, la prisión de Hoa Lo, construida originalmente por los franceses durante la época colonial para encerrar a vietnamitas revolucionarios, fue utilizada posteriormente durante la guerra de Vietnam para encarcelar a los pilotos americanos capturados por las fuerzas vietnamitas.
Fue irónicamente conocida como Hanoi Hilton y ahora es un museo (de los horrores) en el que sus amargas fotos e incluso una guillotina cuentan su historia.
La Pagoda del pilar único
La Pagoda del pilar único, otro de los lugares emblemáticos para ver en Hanoi, es una singular y diminuta pagoda construida en lo alto de un pilar y a la que se accede por unas escaleritas.
Pero su reducido tamaño no le impide seguir siendo un lugar de oraciones y plegarias, sobre todo porque, según cuenta la leyenda, las parejas que deseen tener muchos hijos deberán acudir a esta pagoda y realizar una ofrenda.
Está situada justo en medio del mausoleo y el museo de Ho Chi Minh y la entrada es gratuita.
Museo militar
La historia de Vietnam se puede contar a través de sus guerras. Así lo hace este museo militar de varios edificios en el que, además de rememorar sus batallas a través de imágenes y restos de la guerra, se puede ver una curiosa colección de aviones y helicópteros en bastante buen estado.
Museo de la mujer
Es un emotivo museo dedicado a todas las mujeres del país en el que se refleja tanto su papel en la cultura tradicional de las diferentes etnias como su activa participación en la guerra de Vietnam. En la última planta se hacen exposiciones temáticas.
Museo etnológico
Un interesante y didáctico museo en el que se recogen aspectos culturales, costumbres, trajes típicos e incluso viviendas enteras en las que se puede entrar, de todas las etnias que habitan a lo largo del territorio vietnamita.
Mausoleo de Ho Chi Minh
El mausoleo de Ho Chi Minh se encuentra en Hanoi, un insulso edificio gris que no llama demasiado la atención pero está constantemente vigilado por petrificados guardias. No es más que un inmenso monumento donde descansa el cuerpo embalsamado del susodicho.
La enorme tumba se encuentra en la Plaza Ba Dhin, justo donde él mismo leyó la declaración de independencia en 1945 tras la rendición de los japoneses.
Museo Ho Chi Minh
Muy cerca del mausoleo en el que se encuentran los restos del líder vietnamita se encuentra el museo Ho Chi Minh dedicado a su persona, un edificio de un par de plantas en el que se repasa toda su vida a través de fotos, cartas, vídeos y murales explicativos.
Catedral de San José
La catedral de San José, conocida como la pequeña Notre damme, fue construida en 1886 por los franceses y es sede de la archidiócesis de Hanoi.
Su estilo neogótico y su tamaño resaltan en el lugar en el que está situada, muy cerca del lago Hoan Kiem. Si te alojas cerca no dejarás de escuchar sus campanadas durante la noche.
Mercado nocturno de Hanoi
El mercado nocturno de Hanoi se monta en las calles del Old Quarter las noches de los fines de semana, cerca de la zona del mercado de Dong Xuan.
No es un mercado turístico pues casi nada de los que se vende en él son productos dirigidos a los viajeros, pero en sus estantes se encuentra de casi todo: comida, ropa, accesorios para el teléfono, altavoces e incluso micrófonos.
Vale la pena dar un vuelta por la zona y terminar el paseo en el lago Hoan Kiem, que cierra las calles para los transeúntes e ilumina sus edificios emblemáticos.
Cafeterías vietnamitas
El truco está en entrar a las más discretas, esas que no destacan demasiado pero tienen las mesitas y sillitas ocupando toda la acera, ahí encontrarás el mejor cà phê, el que se sirve en taza, no en vaso de plástico.
Porque sí, lo tienes que probar sí o sí, ese aroma achocolatado, ese sabor extradulce del cà phê sữa o lo refrescante que puede llegar a ser el cà phê dá en los días más calurosos.
Nosotros todavía soñamos con él y se ha convertido en un «must» que ver en Hanoi (y en todo Vietnam)… ¡Viva el café vietnamita!
Recuerda
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